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PERFIL MINISTRA DE LEÓN Robles, la ministra mejor valorada para gestionar un presupuesto histórico en Defensa

Teresa Díaz

Madrid. Margarita Robles, artífice de un incremento «histórico» del presupuesto de Defensa, repite por tercera vez consecutiva al frente de este Departamento con el aval de ser la ministra mejor valorada y tras un lustro en el que no ha cejado en su empeño de poner en valor a las Fuerzas Armadas.

El jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, ha vuelto a confiar en esta magistrada de carrera que ha sabido hacerse un hueco en el seno de las Fuerzas Armadas, de las que se siente «enormemente orgullosa», y que se ha granjeado la consideración de los militares.

Robles (León, 1956) vuelve a dirigir la política de Defensa en un escenario geopolítico cada vez más complicado. A la guerra de Ucrania, país al que España ha apoyado desde que fue invadido por Rusia hace ya más de año y medio, se une ahora el conflicto armado entre Israel y Palestina como telón de fondo.

La ministra se consolida en núcleo duro de Sánchez tras una legislatura en la que se convirtió en la principal adversaria de sus colegas de Podemos en el gobierno de coalición, con quienes ha mantenido enfrentamientos notorios. La ministra no se ha mordido la lengua en sus manifestaciones.

Las divergencias sobre el envío de material militar a Ucrania y el incremento del 26 % del presupuesto en Defensa para 2023 han contribuido a erigirla en bestia negra de sus compañeros de gabinete.

Después de una década de recortes, Robles ha apostado por aumentar la inversión, que «no gasto», como ha repetido en numerosas ocasiones, para mejorar las capacidades operativas de las Fuerzas Armadas en un momento en el que la paz «está seriamente comprometida», y para apuntalar la industria de defensa.

Pero también para avanzar en el objetivo de llegar a una inversión del 2 % del PIB en 2029 al que España se comprometió con sus aliados durante la Cumbre de la OTAN, celebrada en Madrid en junio del pasado año.

«Invertir en defensa es invertir en paz, en libertad, en seguridad y en la creación de puestos de trabajo» ha repetido como un mantra Robles durante su etapa en Defensa.

Fruto de ese notable incremento han sido las cuantiosas inversiones aprobadas en los últimos Consejos de Ministros: más de 14.700 millones de euros desde las elecciones del 23 de julio, con Robles ya en funciones.

En el centro de la diana por el caso Pegasus
Más allá de las diferencias por el gasto militar, la polémica en torno al espionaje con Pegasus a líderes independentistas catalanes situó también a Robles en el centro de la diana de los morados y de sus socios de investidura, que la señalaron como responsable directa y pidieron reiteradamente su cabeza.

Firme en sus convicciones, Robles es inmune al desaliento como ha demostrado en momentos duros como la pandemia, el temporal Filomena, la erupción del volcán de La Palma o el más reciente incendio de Tenerife, episodios en los que las Fuerzas Armadas han participado de manera activa.

También ha tenido que lidiar con otras crisis como la evacuación de colaboradores afganos de Kabul, o las de españoles de Sudán y de Gaza, mediante operaciones militares complejas que ha supervisado minuto a minuto.

Pionera en la feminización de la judicatura, fue una de las primeras magistradas del Tribunal Supremo, la primera presidenta de una sala de la Audiencia Nacional y la primera vocal del Consejo General del Poder Judicial.

Como feminista convencida ha abogado por hacer más atractivo el ejército a las mujeres para aumentar su acceso a la carrera militar. Tres han alcanzado el generalato durante su segundo mandato como ministra, que se suman a la primera que logró el fajín rojo de general, Patricia Ortega, también con ella al frente del ministerio.

Durante su gestión en Defensa, no ha desaprovechado ocasión para poner en valor generosidad y humanidad de los militares, así como para agradecerles haber podido formar parte de «esa gran familia» que son los más de 120.000 hombres y mujeres que forman las Fuerzas Armadas españolas. EFE